terça-feira, 22 de maio de 2012

Abusos no Aeroporto Internacional de Guarulhos


Estava à trabalho no Rio de Janeiro e aproveitei a viagem para visitar minha tia, que mora na Tijuca. Tomei um taxi no centro até a Tijuca e me surpreendi com o baixo valor da tarifa cobrada pelo percurso, mais ou menos R$ 19,00 para ir e R$ 21,00 para voltar.

Em São Paulo seriam R$ 26,60 para ir e R$ 29,10 para voltar em percurso com a mesma distância. Uma diferença de 40% a menos. Comentei com o taxista e ele me explicou que, no Rio de Janeiro, por incrível que pareça, a bandeirada é maior que em São Paulo. O preço pago por quilômetro é que é menor. Muito, menor, argumentei eu.

Ele reclamou da baixa tarifa e eu argumentei que, no Rio de Janeiro, taxi não fica parado, ao contrário de São Paulo, onde os taxis estão sempre impecáveis, já que o motorista tem muito mais tempo para dar um "trato" na lataria enquanto fica horas à espera de passageiros. E o taxista concordou comigo. Melhor menos e sempre do que muito quase nunca.

O preço cobrado pela corrida de taxi em São Paulo é proibitiva. Pior ainda é a corrida do aeroporto de Cumbica. Me lembro que um cliente que atendi no Vale do Rio Doce, em Minas Gerais ficou abismado ao constatar que a viagem de minha casa até o aeroporto de Cumbica ficou mais cara do que a passagem de São Paulo até Governador Valadares - MG. E passei a ir para o aeroporto de ônibus, pois concordei com a falta de lógica nas tarifas cobradas por táxi.

Não obstante as altas tarifas cobradas pela Guarucoop, verifiquei ontem que as tarifas dos taxis do aeroporto internacional de Guarulhos foi reeajustada em 10%.

Fiquei com pena dos motoristas da Guarucoop, pois tenho certeza que, em respeito a seus clientes, mais pessoas tomarão a decisão de utilizar os ônibus para evitar que o deslocamento de 50 km até o aeroporto de Cumbica fique mais caro que o deslocamento de 900 km até Governador Valadares.

domingo, 20 de maio de 2012

O Lobismo, a corrupção e a regulamentação


A palavra lobby tem origem inglesa e significa salão, hall, corredor. Segundo alguns estudiosos, o fato de várias articulações políticas acontecerem nas ante-salas (lobby) de hotéis e congressos, fez nascer a expressão “lobbying” (lobismo) para designar as tentativas de influenciar decisões importantes tomadas pelo poder público, sobretudo aquelas relacionadas a questões legislativas, de acordo com interesses privados de alguns grupos ou setores inteiros da sociedade.

Nos Estados Unidos o lobbismo é parte do processo político e uma atividade política normal para as decisões políticas. Na nossa vida diária, no trabalho e em família, vemos acontecer as tentativas de influenciar decisões de forma natural. Novas aquisições e decisões devem ser analisadas e as propostas efetuadas por interessados pelo fornecimento devem ser ouvidas para que a empresa ou a família possam ter mais lucratividade ou melhor qualidade de vida.

Na esfera política no Brasil, o lobismo é visto como uma atividade suspeita, normalmente associada à corrupção. Mas não deveria ser. Deveria ser, isto sim, regulamentada. Nada melhor que ouvir as razões e interesses dos lobistas, pois estes interesses podem sim, ser de interesse da sociedade. Um meio de transporte mais eficiente, um novo sistema de saúde ou de educação podem sim favorecer à sociedade. Nada melhor do que ouvir, de forma transparente, o que os interessados na implantação da nova solução têm a dizer para que se possa avaliar sua utilidade.

Mas parece que na esfera política, o interesse é o de que as propostas de interesse privado sejam feitas em segredo, ao pé do ouvido de executivos e parlamentares. Parece que esta forma de lobismo é mais lucrativa.

A falta de regulamentação é o que torna o lobismo na esfera do poder público uma porta aberta à corrupção. Existe, engavetado há mais de 20 anos, o PL 1202/07 e até agora não foi apreciado. Será que interessa regulamentar uma atividade pública que, no âmbito privado faz parte do cotidiano? Ou seria melhor deixar do jeito que está?

sábado, 19 de maio de 2012

Homenagem a José Martí


Son 117 años que José Martí, José Julián Martí Pérez, muerto en combate. 


Filósofo, periodista, pensador y poeta, por tanto, luchó por la liberación de Cuba del yugo español. 


Pública, en su honor, una obra propia, un poema que se hizo famoso en la Guantanamera canción.



Versos Sencillos

Yo soy un hombre sincero
De donde crece la palma.
Y antes de morirme quiero
Echar mis versos del alma.
Yo vengo de todas partes,
Y hacia todas partes voy: 
Arte soy entre las artes,
En los montes, monte soy.
Yo sé los nombres extraños
De las yerbas y las flores,
Y de mortales engaños,
Y de sublimes dolores.
Yo he visto en la noche oscura
Llover sobre mi cabeza
Los rayos de lumbre pura
De la divina belleza.
Alas nacer vi en los hombros
De las mujeres hermosas:
Y salir de los escombros
Volando las mariposas.
He visto vivir a un hombre
Con el puñal al costado,
Sin decir jamás el nombre
De aquella que lo ha matado.
Rápida, como un reflejo,
Dos veces vi el alma, dos:
Cuando murió el pobre viejo, 
Cuando ella me dijo adiós.
Temblé una vez –en la reja,
A la entrada de la viña.—
Cuando la bárbara abeja
Picó en la frente a mi niña.
Gocé una vez, de tal suerte
Que gocé cual nunca: --cuando
La sentencia de mi muerte
Leyó el alcalde llorando.
  
Oigo un suspiro, a través 
De las tierras y la mar,
Y no es un suspiro, --es
Que mi hijo va a despertar.
Si dicen que del joyero
Tome la joya mejor
Tomo a un amigo sincero
Y pongo a un lado el amor.
Yo he visto al águila herida
Volar al azul sereno,
Y morir en su guarida
La víbora del veneno.
Yo sé bien que cuando el mundo
Cede, lívido, al descanso,
Sobre el silencio profundo
Murmura el arroyo manso.
Yo he puesto la mano osada 
De horror y júbilo yerta,
Sobre la estrella apagada
Que cayó frente a mi puerta.
Oculto en mi pecho bravo
La pena que me lo hiere:
El hijo de un pueblo esclavo
Vive por él, calla, y muere.
Todo es hermoso y constante,
Todo es música y razón,
Y todo, como el diamante,
Antes que luz es carbón. 
Yo sé que el necio se entierra
Con gran lujo y con gran llanto,--
Y que no hay fruta en la tierra
Como la del camposanto.
Callo, y entiendo, y me quito
La pompa del rimador:
Cuelgo de un árbol marchito
Mi muceta de doctor.

V

Si ves un monte de espumas,
Es mi verso lo que ves:
Mi verso es un monte, y es
Un abanico de plumas.
Mi verso es como un puñal
Que por el puño echa flor:
Mi verso es un surtidor
Que da un agua de coral.
Mi verso es de un verde claro
Y de un carmín encendido:
Mi verso es un ciervo herido
Que busca en el monte amparo.
Mi verso al valiente agrada:
Mi verso, breve y sincero,
Es del vigor del acero
Con que se funde la espada.

X

El alma trémula y sola
Padece al anochecer:
Hay baile; vamos a ver 
La bailarina española.
Han hecho bien en quitar
El banderón de la acera;
Porque si está la bandera,
No sé, yo no puedo entrar.
Ya llega la bailarina:
Soberbia y pálida llega:
¿Cómo dicen que es gallega?
Pues dicen mal: es divina.
Lleva un sombrero torero
Y una capa carmesí:
¡Lo mismo que un alelí!
Que se pusiese un sombrero!
Se ve, de paso, la ceja,
Ceja de mora traidora:
Y la mirada, de mora:
Y como nieve la oreja.
Preludian, bajan la luz, 
Y sale en bata y mantón,
La virgen de la Asunción 
Bailando un baile andaluz.
Alza, retando, la frente;
Crúzase al hombre la manta:
En arco el brazo levanta:
Mueve despacio el pie ardiente.
Repica con los tacones
El tablado zalamera,
Como si la tabla fuera
Tablado de corazones.
Y va el convite creciendo
En las llamas de los ojos,
Y el manto de flecos rojos
Se va en el aire meciendo.
Súbito, de un salto arranca:
Húrtase, se quiebra, gira:
Abre en dos la cachemira,
Ofrece la bata blanca.
El cuerpo cede y ondea;
La boca abierta provoca;
Es un rosa la boca:
Lentamente taconea.
Recoge, de un débil giro,
El manto de flecos rojos:
Se va, cerrando los ojos,
Se va, como en un suspiro...
Baila muy bien la española;
Es blanco y rojo el mantón:
¡Vuelve, fosca a su rincón,
El alma trémula y sola!
  
XI

Yo tengo un paje muy fiel
Que me cuida y que me gruñe,
Y al salir, me limpia y bruñe
Mi corona de laurel.
Yo tengo un paje ejemplar
Que no come, que no duerme,
Y que se acurruca a verme
Trabajar, y sollozar.
Salgo, y el vil se desliza
Y en mi bolsillo aparece;
Vuelvo, y el terco me ofrece
Una taza de ceniza.
Si duermo, al rayar el día
Se sienta junto a mi cama:
Si escribo, sangre derrama
Mi paje en la escribanía.
Mi paje, hombre de respeto,
Al andar castañetea:
Hiela mi paje, y chispea:
Mi paje es un esqueleto.
  
XVIII

Es rubia: el cabello suelto
Da más luz al ojo moro:
Voy, desde entonces, envuelto
En un torbellino de oro.
La abeja estival que zumba
Más ágil por la flor nueva,
No dice, como antes, "tumba":
"Eva" dice: todo es "Eva".
Bajo, en lo oscuro, al temido
Raudal de la catarata:
¡Y brilla el iris, tendido
Sobre las hojas de plata!
Miro, ceñudo, la agreste
Pompa del monte irritado;
¡Y en el alma azul celeste 
Brota un jacinto rosado!
Voy, por el bosque, a paseo
A la laguna vecina:
Y entre las ramas la veo,
Y por el agua camina.
La serpiente del jardín
Silva, escupe, y se resbala
Por su agujero: el clarín
Me tiende, trinando, el ala.
¡Arpa soy, salterio soy
Donde vibra el Universo:
Vengo del sol, y al sol voy:
Soy el amor: soy el verso!

XII

Estoy en el baile extraño
De polaina y casaquín
Que dan, del año hacia el fin,
Los cazadores del año.
Una duquesa violeta
Va con un frac colorado:
Marca un vizconde pintado
El tiempo en la pandereta.
Y pasan las chupas rojas;
Pasan los tules de fuego,
Como delante de un ciego
Pasan volando las hojas.
  
XLV

Sueño con claustros de mármol
Donde en silencio divino
Los héroes, de pie, reposan:
¡De noche, a la luz del alma,
Hablo con ellos: de noche!
Están en fila: paseo
Entre las filas: las manos
De piedra les beso: abren
Los ojos de piedra: mueven
Los labios de piedra: tiemblan
Las barbas de piedra: empuñan
La espada de piedra: lloran:
¡Vibra la espada en la vaina!:
Mudo, les beso la mano.
Hablo con ellos, de noche!
Están en fila: paseo
Entre las filas: lloroso
Me abrazo a un mármol: "Oh mármol,
Dicen que beben tus hijos 
Su propia sangre en las copas 
Venenosas de sus dueños!
Que hablan la lengua podrida
De sus rufianes! que comen
Juntos el pan del oprobio,
En la mesa ensangrentada!!
Que pierden en lengua inútil
El último fuego!: ¡dicen,
Oh mármol, mármol dormido,
Que ya se ha muerto tu raza!"
Échame en tierra de un bote
El héroe que abrazo: me ase
Del cuello: barre la tierra
Con mi cabeza: levanta
El brazo, ¡el brazo le luce
Lo mismo que un sol!: resuena
La piedra: buscan el cinto
Las manos blancas: del soclo
Saltan los hombres de mármol!

XLVI

Vierte, corazón, tu pena
Donde no se llegue a ver,
Por soberbia, y por no ser
Motivo de pena ajena.
Yo te quiero, verso amigo,
Porque cuando siento el pecho
Ya muy cargado y deshecho,
Parto la carga contigo.
Tú me sufres, tú aposentas 
En tu regazo amoroso,
Todo mi ardor doloroso,
Todas mis ansias y afrentas.
  
Tú, porque yo pueda en calma
Amar y hacer bien, consientes
En enturbiar tus corrientes
En cuanto me agobia el alma.
Tú, porque yo cruce fiero
La tierra, y sin odio, y puro,
Te arrastras, pálido y duro,
Mi amoroso compañero.
Mi vida así se encamina
Al cielo limpia y serena,
Y tú me cargas mi pena
Con tu paciencia divina.
Y porque mi cruel costumbre
De echarme en ti te desvía
De tu dichosa armonía
Y natural mansedumbre;
Porque mis penas arrojo 
Sobre tu seno, y lo azotan,
Y tu corriente alborotan,
Y acá lívido, allá rojo,
Blanco allá como la muerte,
Ora arremetes y ruges,
Ora con el peso crujes
De un dolor más que tú fuerte.
¿Habré, como me aconseja
Un corazón mal nacido,
De dejar en el olvido 
A aquel que nunca deja?
¡Verso, nos hablan de un Dios
A donde van los difuntos:
Verso, o nos condenan juntos,
O nos salvamos los dos!


A imprensa se defende atacando

O portal Brasil 247 noticiou e o colunista do iG Jorge Félix confirmou: em ação articulada pelo corporativismo que une a chamada "grade imprensa" brasileira, que é contra a democratização das comunicações, contra a disseminação de blogueiros e contra as redes sociais já que são contra tudo o que tem a denominação de "social" ou "trabalhista", têm ameaçado políticos de ação contra eles com a finalidade de abafar as relações desta mesma imprensa com o submundo dos crimes, das contravenções e da corrupção.


A ação, ao que tudo indica e que precisaria ser investigado, evita a convocação de empresários da imprensa e jornalistas acusados de estar associados ao crime organizado e à manipulações políticas visando ações criminosas de corrupção tanto ativa como passiva.

Fica claro que esta mesma classe, que se tornou um oligopólio com a cooperação entre eles e a ditadura, não quer perder o "direito adquirido" de ser a única fonte de informação e de formação de opinião.

Nos tempos da democracia, sem que sejam eleitos pela sociedade, os jornalões, que por teoria deveriam ser concorrentes, se unem em defesa da classe e se tornam um partido: o Partido da Imprensa Golpista - PIG. Agem de novo em conjunto, aproveitando-se da hegemonia que têm na seleção do que deve ou não ser noticiado, na produção das matérias, na edição do que é veiculado e na distribuição do que foi produzido. Em outros países, não existe a possibilidade de união dos três atributos em defesa da verdade e do jornalismo isento.

Resta à imprensa restante, a que não faz parte do grupo seleto de meia dúzia de "empresários políticos" que formam o PIG e que é denominada por eles de "chapa branca", a internet, acusada por estes mesmos "donos da verdade", de ser manipulada, quando são denunciadas suas manobras, que tentam jogar os partidos um contra os outros e transformar as investigações da CPMI em pizza.

Infelizmente têm tido êxito nesta manobra, demonstrando à opinião pública, a omissão e submissão de nossos parlamentares aos líderes do PIG.

domingo, 13 de maio de 2012

13 de maio - Luta pelo fim da opressão


O dia 13 de maio nos remete a 1.888, data na qual foi assinada pela Princesa Isabel, que ocupava o cargo de Imperatriz no lugar de seu pai, D. Pedro II, em viagem ao exterior.

Foi uma longa luta que vinha desde 1.825, quando a Inglaterra exigiu a extinção do tráfico negreiro e substituição dos escravos. Apesar da substituição dos escravos, não foi extinta a condição sub humana dos africanos e seus descendentes. Nem dos que os substituíram. Não houve nehuma ação humanitária nesta história.

Abolição sem Indenização

Existia, nos últimos anos de escravidão, uma campanha patrocinada por alguns chamada "Abolição sem Indenização". Outros defendiam uma gradual libertação dos escravos, o que de fato aconteceu. Tivemos a Lei do Ventre Livre, de 1.871 e a Lei dos Sexagenários, de 1.885. Nenhuma das duas previa indenização às vítimas do trabalho forçado nem lhes deu cidadania. Mas a revolta era a dos que defendiam o "direito de propriedade" dos senhores de escravos. Fico imaginando a ferrenha campanha da Revista Veja e do Jonal Folha de São Paulo a favor dos senhores de escravos se existissem na época. Todos se preocupavam com a indenização aos proprietários de escravos, os agricultores e industriais. Ninguém dava a mínima para os escravos. Libertavam-nos sem sequer lhes desejar boa sorte, abandnonando-os sem profissão ou recursos.

Poderiam alguns favoráveis ao tratamento desumano dado aos escravos alegar falta de recursos. Entretanto, ainda no primeiro reinado, D. Pedro I investiu 1:400$000 (um conto e quatrocentos mil réis) para trazer aqui para a região onde hoje vivo, que na época (1.827) era a vila autônoma de Santo Amaro (hoje distrito da Cidade de São Paulo), mão de obra oriunda da Alemanha. E a quantia era tão vultosa que quase levou à falência a Província de São Paulo. Vemos que o que faltou foi vontade política para dar cidadania à popolação oprimida de etnias de cor negra, porém brasileira.

No Brasil temos a péssima mania de igualar desigualdades. Recentemente tivemos a Lei da Anistia, onde os "subversivos", ou sejam, aqueles que lutavam pela democracia pararam de ser mortos e não se investigaram os crimes praticados pelos pelos seu algozes, radicais de direita que deram um golpe de estado e que, protegidos pelo aparato do Estado, sem Leis que os amparassem, cometiam crimes contra a sociedade e contra a pessoa humana. Não foi isonomico. Da mesma forma foi a Lei Áurea, que não indenizou os "proprietários" de escravos pelo seu "investimento" e não amparou os infelizes obrigados a trabalho forçado.

Um outro argumento utilizado para a não libertação, era a iminência do aumento da criminalidade. E seria mesmo natural que pessoas oprimidas, violentadas e sem recursos ou condições de exercer alguma atividade acabassem optando pela violência e pela criminalidade. Mas os culpados não eram os ex-escravos, mas quem os deixou nesta situação de penúria.

Hoje, quando aprovada as quotas para negros e índios há quem negue a dívida social histórica.

Vantagem econômica da imigração européia

A libertação dos escravos, ao contrário do que se possa pensar, não impactou tanto assim nossa economia. O custo de um escravo era muito alto. Com a abolição do tráfico escravo, a dificuldade e o custo de aquisição de um escravo era muito alto, sem contar com a manutenção desta mão de obra, que tinha que ser vestida e alimentada. E havia ainda a possibilidade de fuga, o que ocorria frequentemente, a ponto de ser necessária a criação da "Força Pública" criada para coibir a fuga e perseguir os fugitivos que se organizavam em quilombos.

A cafeicultura paulista na segunda metade do século XIX estava em franco desenvolvimento. Em 1.870 já havia uma forte campanha, pelos cafeicultores, para a substituição da mão de obra escrava pela mão de obra imigrante, tendo sido criada a AACI (Associação Auxiliadora da Colonização e Imigração). A tendência era a substituição da mão de obra escrava sem formação, que exigia um alto investimento e capacitação do latifundiário em técnicas de agricultura, pela mão de obra imigrante sob o sistema de parceria.

O sistema de "parceria" era, na realidade, uma semi-escravidão. O imigrante recebia um adiantamento para se deslocar para o Brasil e se manter até que houvessem as primeiras colheitas. A partir das primeiras colheitas, havia uma quantia fixa reajustada anualmente a ser paga ao latifundiário, somava-se ainda a dívida pelo adiantamento recebido. Caso a colheita não suprisse a quantia necesssária para o pagamento ao latifundiário, a dívida era renegociada com altos juros. As condições de sobrevivência das famílias de imigrantes eram sub humanas.

Alguns ícones nacionais do abolicionismo eram movidos por interesses econômicos nesta nova forma de escravidão. Podemos citar o Senador Vergueiro, um português que traficava imigrantes através de sua empresa, a Vergueiro e Cia. Isto prova que não havia preocupação social ou humanitária para com os escravos. Eles simplismente não eram mais úteis e foram "descartados" e substituídos pela nova forma de escravidão.

Conclusão

Não existem "mocinhos" nesta história. Muito poucos se preocuparam, até hoje, com a condição social dos escravos afrodescendentes ou dos trabalhadores servis vindos da europa. Mas estes são a maioria da população e, se estamos em uma democracia, é hora de reinvidicarmos melhores condições e oportunidades para que a Lei indenize os explorados com melhores oportunidades em busca de uma sociedade mais igualitária, tornando estes trabalhadores em cidadãos iguais e com as mesmas oportunidades que têm os latifundiários e seus herdeiros.